Encuentros con…Katharina, Ambra y Sania

Katharina: joyas y libertad

Katerina es alemana, vive aquí desde hace 30 años, sola en su finca, con su perrita Lili.

Llegó aquí con su entonces pequeña hija (ahora tiene 24 años y estudia biología en Londres).

Katerina vende joyas y piedras naturales primero en una tienda de Los Llanos (uno de los 2 principales pueblos de la isla) y desde el covid ha reiniciado su negocio y vende en los mercados o por invitación de amigos dueños de restaurantes o habitaciones para huéspedes. .

Katerina se siente más libre de esta manera: no tiene más horas ni cargos que pagar.
Le gustaría vender su finca, que requiere cada vez más trabajo para comprar una pequeña casa que alquilaría y viviría en una furgoneta.

Ambra: viajes y exploraciones

Hoy, en el mercado, conocí… AMBRA

Una italiana de unos cuarenta años que vive en la isla de La Palma desde hace 13 años. Charlé con ella y me contó una parte de su vida, aquí está el resumen.
¡Y ella aceptó que lo compartiera contigo!

Es originaria de Milán y es la mayor de tres hermanos.
Nació cuando sus padres tenían 18 años y desarrolló con ellos una relación más de amistad y complicidad.

Siempre se sintió fuera de sintonía con sus amigos que amaban la moda y las apariencias. A los 18 años dejó a su familia para viajar por el mundo durante 15 años.

Vivió en Hawaii, Australia, y viajó mucho por el sudeste asiático.

Vive aquí desde hace 13 años y en verano va a Córcega a trabajar en un camping ecológico para guiar a los campistas.

Ambra habla español, italiano, francés e inglés.

Vive con su pareja, originaria de la isla, en una finca (una especie de finca-plantación). Durante el episodio de la covid, se encontraron con existencias de aguacates que ya no podían vender.

Luego se inspiró en lo que había aprendido en Australia: crear sus propios cosméticos naturales. Ahora extrae el aceite del aguacate para elaborar cremas, bálsamos y jabones que vende, entre otras cosas, en los mercados.

Ella y su pareja planean construir una casa ecológica.
Allí les ayuda un belga-francés o franco-belga residente en la isla.

Sania: ¡Textiles y energía!

Sania es eslovena y vende artículos textiles en los mercados:

  • Bufandas
  • Sombreros y boinas
  • Favoritos
  • Accesorios locos: pendientes de plumas, collares de metal que son modulares y parecen serpientes.

No tuve oportunidad de hablar mucho con ella porque estaba ocupada montando su stand. Pero me sorprendió su energía y determinación.

Recorre carreteras y mercados en su furgoneta con su hija de 5 años.

En verano emigra a otra isla: Ibiza donde pasa la temporada.
Me dijo que los multimillonarios que vienen a pasar sus vacaciones gastan a veces 3.000 euros en el mercado.

Contar con un terminal de tarjetas de crédito es imprescindible.

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